Los Juegos del Hambre. Un reality show de muerte.

La verdad de los Reality Shows es en ocasiones humillante. El público vive enajenado siguiendo a cada segundo lo que hace un grupo de personas destinadas a entretenerlo. Pero detrás de este entretenimiento, la planeación, la mercadotecnia y la estrategia a la que se recurre para obtener rating puede ser mortal. The Hunger Games, o los Juegos del Hambre, una adaptación de la novela escrita por Suzanne Collins, es un claro ejemplo de ello.

En futuro apocalíptico e inhumano, la moral humana ha desaparecido y somos testigos del horror que provoca un espectáculo masivo que consiste en la muerte de 23 adolescentes inocentes, algunos aún niños. Se ha convertido en algo normal, y pareciera que la gente vive feliz con ello.

La historia se desarrolla en el desesperanzador y aterrador país de Panem, lo que antes era Estados Unidos.

Panem, está dividido en 13 distritos, siendo el 13º la capital y la ciudad de mayor fuerza y poder, llamada El Capitolio, misma que organiza desde hace más de 70 años, un evento televisivo en el cual un chico y una chica representan a cada uno de los 12 distritos, con edades desde12 a 18 años, y son ofrecidos como tributo en una sangrienta competencia que lleva por nombre el título de la cinta.

Los juegos del hambre son un castigo impuesto por El Capitolio a los 12 distritos, debido a la rebelión que éstos mismos provocaron hace más de siete décadas.

De los 24 jugadores que participan involuntariamente cada año, sólo uno es el ganador. Este juego contrapone la teoría Darwiniana, donde el más fuerte sobrevive. A pesar de que los concursantes viven en un “ambiente natural” (controlado por los productores del reality), en esta competencia no gana el más fuerte ni el más apto. Gana el más hábil y carismático. Sí, el que tenga el don de enamorar al público. En este juego, para sobrevivir tienen que lograr, entre otras cosas, que el público los quiera, ya que los elementos fundamentales para su subsistencia dentro de él, provienen de patrocinadores.

El hecho de ser un programa televisivo, no significa que todo lo sucedido dentro del juego es falso o planeado. Estas circunstancias son reales: el juego se desarrolla en un bosque donde habitan especies venenosas y animales asesinos; sin mencionar las condiciones inadecuadas para los jóvenes y la estrategia a la que ellos deben recurrir para salvar su vida, matar a los demás.

Alrededor de toda la trama y tragedia suscitadas, la historia se desarrolla a partir de un gesto de amor y esperanza, Katniss Everdeen, la protagonista, decide participar en el juego para salvar a su hermana menor, quien temía morir en el reto siendo apenas una niña de 12 años. Por si fuera poco el juego termina cuando Katniss salva una vida más, la del chico del que se enamora dentro del reality.

Luego entonces, es una historia cruda que desenmascara la frivolidad de los medios masivos ante la intención de entretener a sus espectadores, sin embrago, también tiene un toque de hermandad y romanticismo. ¿Será porque los productores saben también que el amor y la esperanza en el cine, hacen de las historias un evento más taquillero?

Cabe mencionar que, considerando la exageración de la vestimenta de los conductores del programa, y de las emociones del público dentro del reality, este filme es una parodia de los reality shows. Sin embargo, en un mundo tan globalizado e individualista, donde la mercadotecnia vende cualquier cosa por vender, y donde impera el egoísmo, habría que preguntarnos: ¿estará demasiada alejada esta ficción de la realidad de nuestros tiempos?

Por: Isela Maya, colaborador en Expok