“He escuchado que has estado rompiendo algunas de nuestras reglas”, dijo Cook a Kalanick en un tono calmado durante una reunión a inicios de 2015, reveló The New York Times.
El sucesor de Steve Jobs, según la reconstrucción de los hechos, recibió al director de Uber en la sede central de Apple, donde le pidió que dejara de violar las normas o la aplicación sería expulsada de la App Store.
En el momento, Kalanick accedió a la petición, ya que si Uber saliera de los iPhone perdería millones de clientes y estaría en riesgo la compañía.
En el perfil que hizo el diario estadounidense sobre Kalanick, se detalla que éste ha llevado a la empresa a tener presencia en más de 70 países y a tener un valor de más de 70 miles de millones de dólares; no obstante, para lograrlo se ha incurrido en violar leyes y reglas, así como huecos legales en el sector.
En el caso de Apple, Uber hacía un rastreo secreto de los iPhone, el cual seguía incluso cuando la aplicación fuera borrada del dispositivo, indicó ayer el Times.
En respuesta a la publicación, la empresa de transporte privado rechazó haber incurrido en tal práctica.
“No seguimos absolutamente a los usuarios individuales o su localización si han borrado la aplicación”, indicó la empresa en una declaración hecha a TechCrunch.
“Como la historia en el New York Times señala hacia el final, esta es una forma típica para prevenir que defraudadores se aprovechen de Uber en teléfonos robados (…). Técnicas similares son usadas para detectar y bloquear accesos sospechosos, a fin de proteger las cuentas de nuestros usuarios. La capacidad de reconocer a agentes dañinos cuando tratan de regresar a nuestra red es una medida de seguridad importante tanto para Uber como para nuestros usuarios”, agregó el vocero de la compañía.
Fuente: Forbes
