Femcafé es un café feminista que visibiliza el trabajo y aporte de las mujeres en la actividad cafetera además, contribuye a mejorar las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres. Y es que en el mundo del café hay mujeres y hombres pero es común identificar a la industria como un trabajo masculino, desde la siembra, la cosecha hasta la comercialización.
Datos de Neewskeek revelan que hace cinco años, Vida AC elaboró un estudio para determinar qué miembro de las familias cafetaleras se beneficiaba de los ingresos del café y quién tomaba las decisiones en cuanto a qué hacer con ellos.
En el estudio se dio a conocer que son los hombres los que siempre tomaban las decisiones a pesar de que las mujeres también participaban.
“Las mujeres difícilmente tienen acceso a la tierra (o a sus ingresos), aunque ellas también la trabajen”, dice Gisela Illescas, miembro de Vida AC y parte del grupo que comercializa Femcafé.
Por esta razón, los integrantes de Vida AC decidieron desarrollar un plan para que las mujeres reciban remuneraciones directas por su trabajo físico.
El plan consistía en que un porcentaje del café cosechado solo sería comercializado por mujeres a lo largo del país. Así nació Femcafé.
Trabajo de las mujeres en los cafetales; Femcafé le da valor
En Veracruz actualmente hay más de 150 familias de cuatro municipios; Ixhuatlán del Café, Cosautlán de Carvajal, Amatlán de los Reyes y Zongolica; ellas trabajan con Femcafé y se benefician de la producción de este grano.
Dentro del campo trabajan todos, pero la comercialización, distribución y administración está manejada únicamente por mujeres.
La esencia de Femcafé es que éste no debería ser un producto solo para unos cuantos, por ello quiere acercar el producto a las familias de manera económica y, al mismo tiempo, dar un precio justo a los productores.
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Cadenas cortas de comercialización más humanas, justas y transparentes
Bajo esta línea, Gisela Illescas explica que 70 por ciento del costo total del café se va directamente a las familias productoras y lo demás es utilizado para gastos de logística y sueldos.
Exportar no fue nada fácil. Uno de los principales problemas que enfrentaron al principio fue el ser una cooperativa campesina y no una empresa, pero una vez más la organización y la seriedad con sus compradores dieron resultados.
Actualmente la mayor parte del café que producen en Vida AC se exporta a Estados Unidos y todo es orgánico.
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Femcafé solo se comercializa en México y se vende ya tostado. Lo encuentras en 18 estados del país, ya sea en tiendas, tianguis orgánicos o cafeterías. Si lo quieres en tus manos, puedes acceder a su página oficial y a sus redes sociales.
Otra oferta de Vida AC es el turismo vivencial campesino. En esta experiencia puedes visitar las comunidades cafetaleras y una familia productora te recibe en su casa. «Ver y vivir el día a día de la vida campesina ayuda a sensibilizarnos acerca de la importancia de dignificar la vida en el campo».
