Amplia experiencia, flexibilidad de horarios, tolerancia a la frustración y más, son solo algunos de los requisitos a cumplir cuando se trata de buscar trabajo, sin embargom hay una pregunta que generalmente queda fuera del radar: ¿Son estas opciones de trabajo digno en México?
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), el 61% de la población ocupada en el país no cuenta si quiera con acceso a una institución de salud, lo que se considera una de las condiciones básicas de empleo digno. ¿A caso estamos buscando una utopía?
Según el marco legislativo que ampara las condiciones mínimas en las que se debe desarrollar una relación laboral… no.
Bases esenciales del trabajo digno en México
En México, la Ley Federal del Trabajo (LFT) ampara y salvaguarda los derechos de las personas trabajadoras. En particular en su artículo segundo estipula que:
Se entiende por trabajo digno o decente aquél en el que se respeta plenamente la dignidad humana del trabajador; no existe discriminación por origen étnico o nacional, género, edad, discapacidad, condición social, condiciones de salud, religión, condición migratoria, opiniones, preferencias sexuales o estado civil.
Ley Federal de Trabajo
Además, en este mismo artículo se señala que un trabajo digno en México es aquel que garantice:
- Acceso a la seguridad social.
- Perciba un salario remunerador.
- Reciba capacitación continua para el incremento de la productividad.
- Tenga beneficios compartidos.
- Condiciones óptimas de seguridad e higiene para prevenir riesgos de trabajo.
Pese a que esto es lo que determina la ley mexicana, la realidad dista mucho de esos ideales consagrados en la legislación, por el contrario, pareciera que el trabajo digno en México es un mito.
La realidad del trabajo en México
Aunado a la falta de acceso a instituciones de salud mencionado anteriormente, el 26.6% de trabajadores labora más de 48 horas semanales, lo que excede el tiempo marcado por la LFT. Esta situación no respeta los derechos laborales e incluso provoca que la productividad sea menor al no otorgar un descanso digno.
Otro dato de relevancia es que 16.3 millones de trabajadores subordinados y remunerados no cuentan con contrato escrito, por lo que tienen un empleo informal. Esto significa que no tienen certeza jurídica sobre sus derechos y por ende ninguno de ellos está garantizado.
Esto y más ocurre en lugares en donde los derechos laborales son inexistentes, sin embargo, de acuerdo con El Economista también existen organizaciones e instituciones que ofrecen trabajo «formal» pero sin todos los derechos laborales.
Hay cierto nivel de contratación por parte de empresas formales que no cumplen con los derechos laborales ni con la ley laboral al momento de contratar a todos sus trabajadores.
Ana Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
La falta de un trabajo digno se desarrolla de manera transversal, de hecho el 25% de los ocupados en el país gana hasta 4,307 pesos al mes, un ingreso que aún está por debajo de la línea de bienestar.
Si bien es cierto que la falta de trabajo digno en México ocurre tanto en la formalidad como en la informalidad. La realidad es que los sectores más desfavorecidos son los informales como trabajadores agrícolas y servicio doméstico. Esta es un área de oportunidad enorme para la Responsabilidad Social Empresarial (RSE).
Dignificar el trabajo es el deber de la RSE
La falta de empleo digno en México, además de ser un reflejo claro de la falta de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y crisis que enfrenta el país, también es una falla en la estrategia de negocios. Esto se debe a que el otorgar condiciones dignas puede traer grandes beneficios tanto para compañías como colaboradores. En el caso de estos últimos:
- Buen ambiente de trabajo.
- Aumento de creatividad.
- Crecimiento personal y profesional.
Esto garantiza que los mejores talentos se queden en la compañía, evita la rotación de personal y proporciona certeza para la empresa, ya que uno de sus pilares más importantes es la fuerza laboral.
Para lograr un trabajo digno se deben respetar los derechos laborales y fomentar un buen trato, así como oportunidades de crecimiento, pues de esa manera crecen las y los trabajadores, iniciativa privada y sociedad.