La palabra “joya” está fuertemente cargada con varios sentidos y, si se los tiene que enumerar rápidamente, uno atinaría a decir sin pensarlo demasiado: “lujo”, “gasto” o “exclusividad”. Ahora bien, gracias a los ejemplos que veremos debajo podremos añadirle “sustentabilidad” a la lista. Veamos por qué:
Joyas que preservan el Amazonas
La modelo y actriz Lily Cole es la artífice de la línea Wild Rubber, la cual está compuesta por una edición limitada de delicados anillos, aros y collares hechos a partir de caucho silvestre producido por campesinos que habitan en Acre, al noroeste de Brasil.
La colección, diseñada especialmente para Sky Rainforest Rescue (una iniciativa de la asociación de World Wildlife Fund y Sky Broadcasting Group que trabaja para proteger los árboles que cubren el Amazonas) se vendió por entero a través del sitio Stylistpick y su recaudación total será usada para ayudar a Sky Rainforest Rescue a seguir protegiendo la selva del Amazonas.
Aprovechando la belleza en sí que poseen los frascos de perfume, el diseñador brasileño Luis Teixeira quiso darle una segunda oportunidad a sus tapas. Gracias a su inventiva, muchas de ellas fueron transformadas en bellos anillos en lugar de terminar sus días en algún relleno sanitario.
Su extravagante línea Lust cuenta con unas 360 “piedras”, la cuales pueden intercambiarse entre sí gracias a un sistema de imanes llamado Change&Go system.
Entendiendo que no hay mejor joya que la naturaleza, Hafsteinn Juliusson, un diseñador oriundo de Islandia, confeccionó estas piezas para llevar a la población urbana un poco de verde.
Con sólo regar estos anillos de plata y musgo una vez cada cinco semanas, se puede disfrutar de su brillo vital a lo largo de todo el año.
Fuente: Tu Verde