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A un año de la elección de 2020 en Estados sumidos, los problemas del presidente Donald Trump parecen no cesar. El juicio político que enfrenta en su país podría poner en juego sus posibilidades de un segundo mandato y su reputación se ha visto seriamente afectada luego de anunciar la salida de su país del Acuerdo de Paris.
Las consecuencias del mal comportamiento del mandatario ahora parecen haber alcanzado a Fundación Donald Trump, que ha sido cerrada y tendrá que donar muy pronto todos los recursos que le sobreviven a otras organizaciones benéficas.
Lo anterior es resultado de la decisión de una jueza; misma que encontró al mandatario culpable de mal uso de los recursos de esta fundación corporativa, en función de sus Inter políticos.
Una juez de Nueva York ordenó hoy al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pagar dos millones de dólares por el mal uso de su fundación, en respuesta a una demanda que alegaba que utilizó esa institución benéfica para promover sus intereses políticos y económicos en relación a la campaña presidencial de 2016.
La jueza Saliann Scarpulla también acordó que tanto la multa de dos millones, como los 1,7 millones de euros de fondos que quedan en la fundación serán donados a otras organizaciones sin ánimo de lucro, ya que la fundación ha sido cerrada.
Scarpulla dijo que Trump violó su deber fiduciario con la Fundación Trump al permitir que su personal de campaña planificase una recaudación de fondos para organizaciones benéficas de veteranos en el período previo a las asambleas de Iowa 2016.
El juez también firmó los acuerdos alcanzados el mes pasado entre los abogados de Trump y la oficina del Fiscal General de Nueva York para cerrar la Fundación Trump. En los acuerdos, Trump admitió haber abusado personalmente de los fondos de la Fundación Trump y acordó devolver 11.525 dólares en fondos de la organización que gastó en recuerdos deportivos y champán en una organización benéfica gala. También acordó restringir su participación en otras organizaciones caritativas.
El pasado 23 de noviembre, Scarpulla rechazó desestimar un caso iniciado en junio contra Trump, tres de sus hijos y la fundación a su nombre después de que la defensa argumentase que no se puede demandar a un mandatario en funciones en una corte estatal.
