Desde abril de 2022, cuando el multimillonario Elon Musk anunció sus intenciones de comprar Twitter, la plataforma ha transitado un camino abrupto en el que su Responsabilidad Social Empresarial (RSE) se ha visto cuestionada. En su más reciente controversia, la desactivación de la función de prevención del suicidio suscitó críticas a la web, poniéndola nuevamente en la mira de sus stakeholders.
Conocida como #ThereIsHelp, esta extensión de Twitter tiene como propósito brindar soporte a quienes lo necesiten, según sus búsquedas o publicaciones. Si el algoritmo detecta que es un contenido sensible y que el usuario tiene tendencias suicidas tras mirar una publicación, un video o una foto, ofrece contacto con organizaciones e intenta desviar la atención.
Lo anterior aplica tanto para temas de salud mental, VIH, vacunas, explotación sexual infantil, COVID-19, violencia de género, desastres naturales y libertad de expresión. Por lo que su impacto dentro de la red es importante, razón que alertó cuando fue suspendida. Y, aunque ya ha sido restaurado, esto ha generado la misma expectativa en torno al compromiso de Twitter y su propietario.
Herramienta antisuicidio en Twitter
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se suicidan cerca de 700 mil personas en el mundo. De las cuales, la mayoría tiene entre 15 y 29 años, siendo la cuarta causa de muerte en este sector poblacional. Aunado a ello, gran cantidad de muertes se cometen en países de bajos o medianos ingresos.
Para entender la importancia que posee la función de prevención del suicidio en Twitter, basta saber que más del 50% de los usuarios de la rede tienen entre 18 y 34 años. Por lo que la herramienta para evitar el suicidio impacta directamente a más de la mitad de quienes se inscriben en la plataforma. Debido a esto, muchas organizaciones han alertado sobre la alta injerencia que tiene el ecosistema digital en evitar o no un suicidio.
El ciberacoso y otras situaciones violentas que alientan a quitarse la vida continúan invadiendo a millones. Por ello, desde hace tiempo, Facebook, Instagram, Snapchat y YouTube han implementando algún tipo de función de prevención del suicidio, en apoyo a sus usuarios. Y, si bien Twitter había seguido este ejemplo, una investigación de Reuters mostró que se había retirado #ThereIsHelp de la red.
Como lo reportó el medio, dos testigos afirmaron que se eliminó la función por orden de Musk, situación a la que el millonario contestó con un tweet, asegurando que era información falsa. A su voz se sumó la de jefa de confianza y seguridad de Twitter, Ella Irwin, que afirmó se trataba de una suspensión para realizar mejoras.
Reactivan la función de prevención del suicidio
A pocos días de la eliminación de la función de prevención del suicidio, esta fue rehabilitada. Se cree que fue por la presión de personas, grupos y organizaciones que enunciaron su preocupación ante este hecho, del cual los usuarios no fueron avisados. Por ejemplo, Irliyani Abdul Rahman, integrante del grupo asesor de contenido de Twitter, destacó que lo ocurrido con #ThereIsHelp «era profundamente preocupante».
Asimismo, indicó que este tipo de mejoras pueden hacerse simultáneamente, por lo que no se requiere borrar la herramienta. Con ello, se añadió un punto más a la manera en la que Musk opera Twitter, pues si este tipo de acciones se están tomando a la ligera, lo cierto es que la plataforma ya no ofrece garantías de seguridad a sus usuarios.
«Si esta decisión es emblemática de un cambio de política en la que ya no se toman estos temas en serio, eso es extraordinariamente peligroso».
Alex Goldenberg, analista principal de inteligencia del Instituto de Investigación de Contagio de Red.
Además, tomando en cuenta que se especula que esta acción nació de una decisión de Musk, el panorama resulta más complejo, pues pareciera que este medio, con casi 200 millones de perfiles, está bajo un régimen autoritario. Hay que recordar que, hace poco, algunas cuentas de periodistas fueron suspendidas, sin motivo aparente.
La paradoja de la red
Desde la incursión de las redes sociales, el mundo y su manera de vincularse sufrió una transformación nunca antes vista. De repente las distancias se acortaron, brindando la posibilidad de interactuar con personas de cualquier lugar del mundo. Si bien esto podría ser la misión principal de dicha invención, lo cierto es que su magnitud las han convertido en una extensión de nuestra realidad, lo que conlleva que se repliquen nuestras problemáticas.
Muestra de ello son los casos de autolesiones «inducidas» por las redes. Aunque el suicidio es un acto complejo y multifactorial, investigaciones han demostrado que el uso de las plataformas ha tenido un efecto negativo en personas que se encuentran en riesgo de atentar contra ellas mismas, sobre todo cuando se trata de jóvenes.
Por lo que apoyos como la función de prevención del suicidio en cualquier red son fundamentales; sin embargo, con la eliminación de esta herramienta en Twitter, se ha visto cómo es posible tomar medidas drásticas sin considerar el impacto de este medio. Lo que se ha convertido en un asunto grave y que puede poner en riesgo a millones.
En este sentido, aunque Musk ha asegurado que se está trabajando en medidas para erradicar el contenido violento y dañino, continúa demostrando que existe una falta de RSE en las decisiones de su nueva compañía, algo que ya está afectando las acciones de Tesla, su emporio tecnológico.
