En el último año, la comercialización de marcas de cigarrillos importados ilegalmente han penetrado en el gusto de los fumadores, sobre todo en las regiones centro, norte, y centro-pacífico.
Según el estudio «Información del Consumidor a través de su Cajetilla», realizado por vez primera por la Agencia Internacional de Investigación de Mercados TNS en 50 ciudades del País, las localidades o estados donde se detectó un mayor consumo de cigarros introducidos al País de contrabando son Tapachula, Aguascalientes, Nuevo Laredo, Tijuana, León, Jalisco y Mérida.
Para evitar sesgos en la información, TNS realizó una encuesta preguntando qué cajetilla portaba en ese momento el entrevistado, y con base en las respuestas obtuvieron resultados.
De 4 mil 700 encuestados en 50 ciudades del País, 6.31 por ciento mostró una cajetilla de contrabando, y el resto, una lícita.
Las marcas ilegales de cigarros que más se conocen e identifican en el País son Seneca, Garañón, Euro, Bill, Farstar, New York, Joe’s, Evidence, D&Y, Jaisalmer, Win, Hills, JohnBlack, Fox, Blitz y Kingsboro; pero los más consumidos son los tres primeros.
Al preguntarles cuántos cigarros fuman al día de estas marcas, TNS registró que 7.14 por ciento consume alguna de estas marcas.
Otra medición que utilizó TNS para conocer los hábitos de los fumadores de marcas de contrabando, fue el conocimiento que tienen de algunas de ellas.
Según la Ley General para el Control del Tabaco, las marcas ilegales de cigarros son aquellas que no cumplen con los lineamientos como normas de etiquetado, empaque, y normas de salud.
Fuente: Reforma, Negocios, p. 6.
Por: Dayna Meré.
Publicada: 15 de agosto de 2011.