La Comisión Mundial de Medioambiente y Desarrollo define desarrollo sustentable como “aquel que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad para satisfacer las necesidades de las generaciones futuras”. Hace algún tiempo, Mario Kreutzberger, Don Francisco, recordó que la filantropía, es decir, el ayudar a los demás para alcanzar en conjunto mejores niveles de vida, es vista en otros países como parte del progreso de las empresas, denominándola “filantropía del éxito”.
Ambos conceptos, que muchos quieren mostrar como no relacionados o al menos con escasa vinculación, tienen que ver con el hecho de pensar en los demás y no sólo en uno mismo; de reconocer al otro con sus virtudes y carencias; de buscar la forma en que la colaboración de unos puede significar el empuje definitivo para otros.
Se requiere, eso sí, que la filantropía esté adecuadamente enfocada para que no caiga en esfuerzos vanos o incompletos. Por ello existe una serie de instituciones especializadas en articular los esfuerzos de las personas y las empresas para garantizar el éxito de estas acciones. Así, para que funcione, en el proceso filantrópico se complementan cuatro ejes principales: el empresarial, el gubernamental, el social y el no gubernamental.
Haciéndonos eco de este concepto, en octubre del año pasado lanzamos un proyecto emblemático: Compromiso Atacama. Como nunca antes, la sincronía de intereses tras un fin común, tanto de organizaciones solidarias de la trayectoria de Un Techo para Chile, América Solidaria y Fundación Teletón, así como de Barrick en el ámbito de la empresa privada y del Gobierno de Chile, se unieron para crear una mega alianza que busca promover, justamente, el desarrollo integral y sustentable de la Región de Atacama.
Además de estos actores “fundadores” de la iniciativa, esta semana firmamos el ingreso de un nuevo aliado en esta travesía. Se trata de Pacto Global, el foro internacional de Naciones Unidas creado en 1999 por el ex secretario general Kofi Annan, que se sumó al proyecto, con lo cual Compromiso Atacama se integra al grupo de 5.800 organizaciones que se han unido –a nivel mundial- ante la ONU para fomentar la responsabilidad social empresarial.
Compromiso Atacama representa quizás la iniciativa más completa que se haya diseñado para una región específica del país. Concretamente, durante los primeros tres años de implementación buscará erradicar más de 700 familias de campamentos de extrema pobreza, tanto en Copiapó como en Vallenar; concretar el primer centro de rehabilitación de Teletón en la región; y aportar con jóvenes profesionales que colaborarán estrechamente –junto a las instituciones, comunidades y municipios locales- en el diseño e implementación de programas que buscan el desarrollo sustentable de la región. Asimismo, el programa Clase 21 – a desarrollarse en conjunto con Intel y la Fundación Cisneros – va en esta misma línea, pues busca promover a través de Compromiso Atacama el uso de nuevas tecnologías y una educación digital en los niños de la región, reduciendo la actual brecha existente en esta materia.
En total, este conjunto de acciones beneficiará directamente a cuatro mil habitantes y está orientado en la línea del desarrollo sustentable, ya que apuesta al futuro del país y a dar otro gran paso en la búsqueda de una sociedad que ofrezca un mejor estándar de vida a sus ciudadanos, como parte del esfuerzo mancomunado entre el mundo privado, el público y las organizaciones sociales.
Fuente: Portal Minero