Abertis y Goldman Sachs, quienes componen el consorcio Autopistas Metropolitanas de Puerto Rico (Metropistas), anunciaron la donación de un millón de dólares para ayuda humanitaria tras el paso del huracán María, por la isla.
El donativo será canalizado a través de tres ONG que han estado activamente envueltas en diversos aspectos de los esfuerzos de ayuda en Puerto Rico. Se trata de Unidos por Puerto Rico, la Cruz Roja Americana y Team Rubicon, cada una de las cuales recibirá una porción del total.
Metropistas es el consorcio privado que opera y mantiene las autopistas PR-22 y PR-5 conforme a un acuerdo de alianza público-privada a largo plazo que data del 2011.
El paso del Huracán María
El huracán María azotó a Puerto Rico con los niveles de viento del huracán Irma, inundó la isla con los niveles de inundación del huracán Harvey, cortó las comunicaciones, destruyó edificaciones y averió una represa que ahora representa un serio riesgo de catástrofe para los habitantes que viven aguas abajo.
Pero para una devastación que ha sido descrita como “apocalíptica”, la ayuda ha llegado muy lentamente, dicen los funcionarios y los habitantes. El gobernador Ricardo Rosselló dijo que el país enfrenta una crisis humanitaria.
Instó al Congreso a aprobar un paquete de ayudas proporcional, mientras este territorio autónomo de la mancomunidad estadounidense, ya bastante golpeado por una crisis económica prolongada, intenta levantarse.
“Necesitamos algo tangible, un proyecto de ley que realmente responda a nuestras necesidades ahora mismo”, dijo. “De otra manera, habrá… un éxodo masivo al territorio continental de Estados Unidos”.
Tras el paso del huracán María, millones de personas se quedaron sin energía eléctrica y sin comunicaciones.
Es como si Puerto Rico hubiera sido golpeada con la fuerza de los vientos de Irma, dejando un rastro de devastación mucho peor que la destrucción que Irma dejó en Florida”, dijo el meteorólogo Judson Jones.
“La lluvia que cayó en algunas partes de Puerto Rico compite con la cantidad de lluvia que cayó por Harvey en Houston. Y ahora están luchando con el desastre de una represa que recuerda la crisis de la represa de Oroville, en California, a principios de este año».
De acuerdo con La Vanguardia, Puerto Rico está sufriendo de escasez de agua, mal estado de carreteras, casas derrumbadas y todavía siguen sin elecricidad.
Los daños ascienden a 90 mil millones de dólares, ya que el huracán dejó un cuadro con 250 mil viviendas destruidas total o parcialmente.