Ernesto Maurer, gerente del patronato del Bosque de los Árboles de Navidad en Amecameca, dijo que en 1950 decidieron experimentar con los árboles importados para comercializarlos en México.
Aseguró que ese sueño no fue una tarea fácil, por la dificultad para que un árbol de esos se desarrolle en México.
“Para que las familias acudan a Amecameca por un árbol en temporada navideña, existe un trabajo arduo detras”.
Dijo que su equipo desarrolló un híbrido de mayor durabilidad, aspecto frondoso y agradable a la vista de sus clientes que lo nombraron como “el oso de los árboles de navidad”.
Recordó que el árbol de navidad que se vende en centros comerciales y mercados populares es de la modalidad Douglas, el cual se importa desde Canadá y Estados Unidos.
La empresa de Maurer quiso beneficiar a los campesinos y a la patria, al producir este tipo de árbol en México.
Compartió que fue un proceso difícil ya que encontraron ejemplares en mal estado, pero al final lograron tener árboles navideños para la gente.
Actualmente cuenta con dos huertos semilleros de esa misma especie, el bosque de los árboles de navidad “tiene el orgullo de salvar y producir el árbol Douglas para México”.
También desarrollaron una técnica para que al momento de cortar el árbol el tronco no muera: “Nosotros no matamos árboles, cultivamos árboles”.
De esta manera, el tronco producirá nuevos retoños para que siete años después florezca un árbol nuevo.
La plantación cuenta con más de medio millón de árboles, aunque dijo que no todos se venden en una sola temporada, ya que están en crecimiento.
Compartió que en la modalidad de “córtelo usted mismo”, el costo de árbol Douglas es de 495 pesos con aproximadamente 2.50 metros de altura.
El bosque de los arboles de navidad en Amecameca es el plantío más grande a nivel mundial con más de 500 hectáreas, que en esta temporada recibe la visita de 10 mil familias cada fin de semana.
Aseguró que su empresa es la fuente de empleo más grande de toda la zona de Amecameca, aunado a ello, se convierten en un centro turístico por todas las actividades que las familias tienen a su alcance al visitar los plantíos.
“En épocas navideñas contamos con 200 niños que ayudarán a los clientes a cortar su árbol, y también cientos de trabajadores que están de tras de esta actividad”, explicó.
El bosque de los árboles de navidad de Amecameca es un lugar dónde se propone la salvación del país para que la ecología apoye a los seres humanos en beneficio de futuras generaciones.
Fuente: El Universal
