Desde hace tiempo en la Ciudad de México se ha implementado una distinción de la sección de hombres y de mujeres en el transporte público con la intención de eliminar el problema de acoso y hostigamiento sexual.
La infraestructura especial para mujeres van desde taxis rosas, vagones del metro, vagones del metrobús y camiones donde no suben hombres. Con ello, se buscó ser «más amigable» con las mujeres y fortalecer los derechos de las mujeres para transitar con «libertad y seguridad».
De esta manera, supuestamente se podía evitar el hostigamiento, violación u ofensas hacia las mujeres. Sin embargo, la medida no ha sido suficiente. De acuerdo con la titular del Instituto Municipal de las Mujeres (Immujeres) en León, Mónica Maciel Méndez la implementación de “vagones rosas” no es una solución contundente para el problema de acoso y hostigamiento que diariamente sufre la población femenina en el transporte público.
Ella dice que el vagón exclusivo para mujeres no se va a implementar en un futuro cercano y detalló que la segregación por sexos no es una solución de raíz, pues los espacios públicos tienen que ser para todas las personas.
“Justo fue un tema que vamos a tratar. Y creo que nosotras lo hemos dicho en varias ocasiones: genera segregación y no es la medida que resuelve, a lo mejor se pueden tomar medidas de carácter temporal. Se tiene que mandar el mensaje de que los espacios tienen que ser para las mujeres y no solo para algunos. Nosotras insistimos que los espacios sean para todos. La medida de segregar, pues no te resuelve el problema”, dijo.
Para tener un panorama sobre la situación que cada mujer enfrenta en el transporte público, se realizan encuestas diariamente a las mujeres en el transporte público, lo que les permitirá tener información clave que les permita diseñar estrategias de prevención y atención de los delitos.
“Nosotros estamos analizando cuál es la situación de acoso sexual en el transporte público, para eso justamente son estás encuestas, entonces tendríamos que ver cuáles son las respuestas y así podemos ver cuáles son los resultados y así ver las necesidades y en qué cosas tendríamos que seguir impactando nosotras para estar reforzando”, refirió.
«Una parte que vale la pena mencionar es que una situación que también genera todas las formas de violencia, incluida la intrafamiliar, tiene que ver con las brechas de desigualdad, entonces necesitamos revisar por ejemplo cómo estamos en ese sentido y qué experiencias tienen las mujeres también en esos escenarios del transporte público, qué es lo que hace falta, cuál es la mayor problemática”, expresó la titular del Immujeres.
Cabe resaltar que «Viajemos Seguras» fue un programa que se implementó en 2008 y que continúa hasta hoy con el nombre “CDMX Ciudad Segura y amigable para mujeres y niñas”.
Desde ese mismo año, RTP pone en marcha los autobuses rosas “Atenea” que son de uso exclusivo para dichos grupos. En abril de 2016, a raíz de las manifestaciones del #24a en contra de las violencias machistas, el gobierno de la CDMX reforzó todas estas medidas con la presencia de policías en dichos vagones, además de las multas y sanciones administrativas para aquellos hombres que no respeten los espacios asignados.
La separación de vagones trata el problema del acoso sexual de una manera muy superficial, porque el verdadero conflicto se encuentra mucho más en lo profundo de nuestra sociedad y no puede solucionarse sólo con estas medidas.