De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la viruela símica avanza, así lo demuestran datos recientes de la agencia perteneciente a la Organización de las Naciones Unidas que registró 7,500 casos, un aumento del 20% de lo que se había documentado previamente.
Ante este incremento, focalizado en Europa y América, Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, ha vuelto a hacer un llamado a los países de todo el mundo para tomar medidas de prevención y detener la transmisión y evitar una pandemia generalizada como sucedió con la COVID-19.
«Las infecciones de viruela del mono siguen aumentando en todo el mundo, con más de 35,000 casos en 92 países y territorios, y 12 muertes».
Organización Mundial de la Salud (OMS).
Viruela símica avanza
La viruela del mono —una infección zoonótica vírica, lo que significa que puede propagarse de animales a seres humanos— fue descubierta en 1958, cuando ocurrieron dos brotes de una enfermedad similar a la viruela común en colonias de simios mantenidos para labores de investigación.
Y aunque había permanecido regionalizada, tras registrarse un crecimiento inusual de contagios en naciones no endémicas, los organismos nacionales e internacionales comenzaron a vigilar y trabajar para detener la propagación. Hasta el momento, los casos del brote se han presentando mayoritariamente en hombres, pero el organismo sanitario ha salido a informar que ninguna persona está exenta de contraerla.
«La evaluación de la OMS es que el riesgo de la viruela del mono es moderado a nivel mundial y en todas las regiones, excepto en la región europea, donde evaluamos el riesgo como alto».
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
¿Y la vacuna?
En medio de la preocupación global por los contagios, y la declaración de la viruela del mono como emergencia de salud pública, la compañía de biotecnología danesa, Bavarian Nordic (BAVA.CO), obtuvo la aprobación del la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) para incluir la vacuna Imvanex como medida de prevención.
Sin embargo, la OMS ha instado a vacunar a aquellas personas que estén en situación de riesgo —por ejemplo, alguien que ha tenido contacto directo con una persona que tenga el virus—, por lo que no se recomienda la vacunación masiva en este momento.
Aunado a lo anterior, los suministros mundiales de vacunas contra la viruela del mono son limitados, al igual que los datos sobre su eficacia. La OMS está en contacto con los fabricantes, con países y organizaciones dispuestos a compartir dosis.
«Seguimos preocupados de que se repita el acceso desigual a las vacunas que vimos durante la pandemia de COVID-19 , y que se siga dejando atrás a los más pobres».
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
COVID-19, el otro gran desafío de la humanidad
Por otra parte, el director de la OMS ha señalado que en las últimas cuatro semanas se han registrado 15,000 decesos por COVID-19, a pesar de que se han intensificado las medidas de prevención y se ha instado a los Estados a seguir con las campañas de vacunación. Y destaca que aunque estamos cansados de la COVID-19, «el virus no está cansado de nosotros”.
Con Ómicron siendo aún la variante dominante, y su subvariante BA.5, los Centros para el Control y la Infección de Enfermedades en EE.UU (CDC) aseguran que el virus se ha vuelto más eficiente a la hora de evadir el sistema inmunitario y ello ha estado impulsado mayores contagios.
La buena noticia es que la vacunación y refuerzos siguen protegiendo de enfermarse gravemente. «Es muy importante que la gente entienda que las vacunas no proporcionan una protección a largo plazo contra la infección, pero aumentan significativamente la probabilidad de que la enfermedad sea breve y no grave», explica el doctor Stephen Goldstein, virólogo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Utah.
Pero, a medida que se acerca un clima más frío en el hemisferio norte y que las personas pasan más tiempo en el interior, el riesgo de transmisiones más intensas podría aumentar. Por ello, la OMS llama a no bajar la guardia y continuar con las medidas de prevención, como mantener la sana distancia y uso de mascarilla.
