Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención de la Salud de la Secretaría de Salud, consideró que ya es el momento de que las empresas en México cuenten con sistemas de sanidad, suspendan todas las actividades no esenciales que involucren congregación de personas en sus instalaciones y fomenten el trabajo en casa o de manera remota.
En contraste con esta realidad, especialistas consideran que el home office en México tiene alcances limitados, debido a las características de la economía nacional, pues más de 90% de las corporaciones son pequeñas y medianas empresas (pymes).
En México existen más de 4 millones de pymes, que generan 72% del empleo del país y 52% del PIB, informa el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Este es un enorme reto para el mundo laboral y le exigirá una profunda transformación, desde el acceso a herramientas digitales, medidas de higiene, reducción de jornadas laborales, políticas de responsabilidad empresariales y leyes del trabajo, advirtió el profesor en Recursos Humanos de la Universidad La Salle, José Ramón Barreiro.
Enfatizó que “nadie está preparado para este tipo de contingencias, ni gobierno, ni empresas y ni la misma sociedad. Podemos ejemplificar que nadie puede forzar a que los empleados hagan home office”.
“El coronavirus (COVID-19) provocará implementar nuevas políticas de responsabilidad social para atender las necesidades de los empleados. Las empresas no están preparadas para mandar a todos sus trabajadores a casa, muchos menos en que va a pasar con sus proveedores y clientes”, dijo.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Ciudad de México (CDMX) informó que se requiere de un eficaz diálogo y, sobre todo, colaboración entre gobierno, sociedad e iniciativa privada para poner en marcha medidas que permitan a la capital del país seguir operando en su actividad económica y contar con herramientas de salud apropiadas a la contingencia.
Entre las acciones que Coparmex CDMX propone en aspectos de COVID-19 están:
- Transparentar la información sobre la dimensión del avance de los contagios.
- Instalar un Comité de Emergencia de Alto Nivel, integrado por autoridades capitalinas, iniciativa privada y sectores sociales.
- Instaurar un Plan de Salud, para establecer las medidas más relevantes y evitar contagios.
- Ejecutar medidas de sana distancia entre la población.
- Establecer campañas de comunicación empresariales con información relevante sobre cómo prevenir y atender el COVID-19 en sus centros de trabajo y en los hogares de los empleados.
Oídos sordos a suspensión de impuestos
La Coparmex nacional y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) han hecho una petición para que la administración federal otorgue mayores estímulos fiscales para aminorar y contener el impacto negativo que pueda ocasionar la emergencia sanitaria.
Ambos organismos empresariales hicieron un llamado a la Federación, para acelerar la devolución de impuestos, en particular del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y declarar una suspensión temporal de pagos provisionales del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
Pese al llamado de la iniciativa privada, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha ratificado que el plan de atención al coronavirus no tiene contemplado ningún estímulo económico a las empresas o devolución de impuestos. “Les pedimos -empresarios- que mantengan control de los precios de sus insumos”.
¿Qué pueden hacer las empresas?
La International Chamber of Commerce (ICC) dio a conocer algunas recomendaciones para que las empresas minimicen el impacto del COVID-19:
• Desarrollar políticas organizacionales para reducir la transmisión del virus.
• Asegurar que los empleados al sentirse mal no se presenten al trabajo.
• Establecer un sistema de reporte para cualquier caso de transmisión.
• Asegurar que los empleados tengan atención medica garantizada.
• Restringir los viajes a zonas de alto riesgo.
• Actualizar sus botiquines de atención médica.
• Exigir a los empleados cuyo trabajo implica una proximidad inevitable el uso de mascarillas.
• Organizar a los empleados para evitar agruparse en los ascensores.
• Reorganizar el espacio de trabajo para garantizar la distancia personal.
• Desinfectar áreas públicas y superficies frecuentemente tocadas en las empresas.
• Dar un amplio mantenimiento al aire acondicionado y cambiar filtros.
• Mantener 3 pies de distancia mientras se alimentan las personas.
• Verificar de manera frecuente la salud del personal de la cafetería.
Muy bueno!!