El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y las grandes empresas han centrado su segunda reunión en La Moncloa en buscar soluciones para mejorar la competitividad española en el exterior, problema que han abordado en dos cuestiones esenciales: el coste energético y la formación laboral.
La reunión de cuatro horas con 41 grandes empresarios españoles y el presidente de la CEOE, Joan Rosell, ha concluido con pocas novedades. El anuncio más importante, el acuerdo para crear un programa de 30.000 becas de seis meses para los más jóvenes, dirigido por un grupo de trabajo coordinado por el presidente de Telefónica, César Alierta, y la patronal.
«Es un axioma del mercado laboral: la formación conduce a la empleabilidad» explicó Zapatero sobre la necesidad de reforzar la Formación Profesional. Por ello, los empresarios han mostrado su interés en el programa de becarios. El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, por ejemplo, prometió 2.000 becas para este programa.
Respecto a las pequeñas y medianas empresas, excluidas de esta cita, Zapatero apeló a la «responsabilidad particular» de las grandes para que extiendan sus capacidades de formación a sus empresas auxiliares, medida que contará con incentivos del Gobierno en el futuro.
Por otra parte, otros de los asuntos clave que pusieron sobre la mesa las empresas fueron las administraciones autonómicas y el déficit eléctrico. Para hacer competitivos sus negocios frente al exterior, quiere que los costes energéticos sean inferiores. No obstante, Zapatero no detalló ninguna medida concreta salvo que será revisada la capacidad eléctrica instalada y los costes del actual ‘mix energético’, en el que las primas a las energías renovables ya fueron reducidas.
Este país recordará ‘tres años de decisiones difíciles’
Zapatero insistió tras la reunión en que las «difíciles decisiones» tomadas por su Gobierno, como la reforma laboral, la reducción del gasto público y los salarios de los funcionarios, el incremento de la edad de jubilación, o la transformación del sistema financiero, servirán para hacer de España un país mejor en el futuro.
A estas medidas se sumarán otras reformas en el futuro. Además de reclamar una vez más que empresarios y sindicatos acuerden en abril el nuevo sistema de negociación colectiva, el presidente del Gobierno anunció en la víspera de la reunión que habrá una regla de gasto público para el Estado y las autonomías vinculada a la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) y que habrá incentivos para intentar regularizar cuatro millones de empleos sumergidos.
«Nuestras decisiones, no populares, darán sus frutos. Mayor competitividad, mayor capacidad exportadora… recordaremos que fueron fruto de dos o tres años de medidas difíciles», apostilló.
Competitividad, competitividad, competitividad
El presidente del Gobierno citó en numerosas ocasiones el concepto de competitividad, la clave ahora que Alemania exigió mejorarla en los países de la eurozona a cambio de ampliar el fondo de rescate.
Aunque desde la anterior reunión de noviembre «el diferencial -del bono español a 10 años respecto al ‘bund’ alemán- ha bajado en 100 puntos básicos», no se puede bajar la guardia», advirtió Zapatero.
Otras reformas anunciadas por Zapatero, aunque no concretadas, afectarán al Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX) y a los horarios comerciales. Las empresas insistieron en mejorar la internacionalización para hacer la economía «estructuralmente exportadora». «Sería el mejor índice de competitividad», dijo Zapatero.
Reunión en La Moncloa
Tres empresas de las 44 invitadas, Grifols, Hoteles Riu y Ebro Foods, declinaron acudir a La Moncloa. Según fuentes del Gobierno, sus responsables no pudieron acudir por diversos motivos de agenda.
Los representantes de las empresas más importantes de España llegaron en sus coches al Palacio de la Moncloa, en cuyos jardines fueron recibidos por los responsables del servicio de protocolo de la Presidencia del Gobierno, que les acompañaron hasta el salón de columnas donde se celebró la reunión.
Poco después de las 09:30 horas empezaron a llegar los empresarios y uno de los más madrugadores fue el presidente de ACS-Dragados, Florentino Pérez, también de los primeros en someterse a los flashes de los medios gráficos que han recogido la llegada.
Poco después entraron el presidente de la CEOE acompañado de Isidro Fainé, presidente de La Caixa; César Alierta (Telefónica); Isidro Álvarez (El Corte Inglés); José Manuel Lara (Planeta), José Manuel Martínez (Mapfre); Pablo Isla (Inditex); Rodrigo Rato (Bankia) y Petra Mateos-Aparicio (Hispasat), entre otros.
Todos saludaron a los representantes de los medios gráficos y alguno, como el presidente del Banco de Santander, Emilio Botín, se entretuvo algo más al comentar a los fotógrafos y cámaras de televisión que se alegraba de volverles a ver y que hoy hacía menos frío que la última vez, el 27 de noviembre, cuando Zapatero les citó en La Moncloa para abordar las medidas contra crisis económica.
El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, llegó al Palacio a las 09:55 horas, para incorporarse a una reunión en la que también participó la vicepresidenta económica, Elena Salgado.
Luis Fernando Rivero (Sacyr-Vallehermoso) fue uno de los últimos en llegar al Palacio de la Moncloa. A la reunión fueron convocadas 13 empresas más que en el encuentro del 27 de noviembre.
Fuente: El Mundo.es
Reportero: Javier González.
Publicada: 26 de marzo de 2011.
